Mi sensual compañera de trabajo coreana alberga un profundo e insaciable deseo de masculinidad.Cada día, se queda ansiosa por más de la firme y pulsante promesa de virilidad.Sus ojos, como los imanes, se ven atraídos por el atractivo de un falo robusto.Esta es una historia de lujuria insaciables y fantasías de oficina prohibidas.